lunes, 6 de agosto de 2007

A mi me dejan de joder… (un cuento interesante)

Creo que llovía, o había sol…ni idea, igual no influye en el relato, pero no sabía como empezar.
La cosa es que pongo un tema y un dedo (de esos que nunca faltan) pone stop, luego aprieta open y extrae el cd con no mucho cuidado y pone esa música que no desagrada pero me produce una sensación distinta a la de los demás chicos que estamos ahí. El asadete al horno ya está casi listo y mi fernet agoniza de pobre.
Ese dedo siempre hace lo mismo, cada vez que nos juntamos. Y es gracioso, porque si le hacemos marca personal entre cinco lo anulamos de tal manera, que luego de merodear por el lugar, alega sueño o algo que se le ocurra y escapa.
Estaría bueno decir de quien es ese “dedo”, pero aguanten la mecha che! Si no, no me puedo hacer el stifin kin.
Esta manía del dedo, data desde la época en que conocí a la persona que porta a la mencionada extremidad. Primero lo tomaba con calma, pero a medida de que los meses y años pasaba, ese condenado dedo, siempre interrumpía alguna canción de mi agrado, ya sea bon jovi, guns and roses o ricky martin. Si ya se, ya se, ustedes le daría la razón a ese dedo, pero y a mí??
Pero porque no me levantaba y extirpaba ese dedo violador, dictador también y manipulador de cd´s? no se.
Y no solamente lo hacía en mi casa, también en la camioneta, el usurpador estaba en todos lados.
Recuerdo haberme peleado y discutir con el portador del dedo en una ocación y debo confesar que fue un mal trago para mi, me sentí muy para el orto. Entonces erase una vez en los campos de mi conciencia, que entendí algo. El dedo controlaba la mente de mi amigo y hacia que me irritara cada vez que posaba su huella digital en el reproductor de cd´s. el pleito no era con mi amigo…era con el dedo.
Idee un plan para contrarrestarlo y fracasé al intentar siquiera volcarlo en un papel. Y era obvio de entrada nomás, a quien se le ocurre un plan contra un dedo.
Creo que empezaba a afectar mi lucidez esta situación y me resultaba preocupante. Decidí salir a tomar aire y a reconciliarme con esa extremidad enemiga.
En el fondo me molestaba y a la vez me gustaba que haya una diferencia entre ese dedo y yo, una diferencia que cuando me aliaba con él, hacíamos una música mejor (para nosotros) que la que escuchaba yo o el portador de ese “dedo forro”. La pucha que me puse meloso.
Tonces en ese momento!! Dije:… la puta!! Se me quema el asadete!! Volví cual rayo baja por el árbol elegido y en ese momento…, se congeló el aire y lo ví. Navegando en las cuerdas de la guitarra de mala muerte que tengo y cagándose de risa. Ese dedo es un hijo de puta, pero lo quiero al guacho.
Así es mis queridos lectores, una simpática historia de un simpático dedo emperrado en hacerme la vida difícil en cada asado pero ojo! Que en esa diferencia está la magia, esa magia que me agrada, esa magia creada por ese dedo forro en la guitarra de mi amigo. La pucha!! Me puse meloso otra vez

IVAN

1 comentario:

Anónimo dijo...

derriben asl dedo dictador!!!!! no es solo de tu amigo hay muchos malditos dedos que por estos lados hacen lo mismo su plan es irritar a gente como uno ......hay q sacar el lado mas oscuro de uno y demostrale a ese dedo que los nuestros tb mandan jajajaja a derrocar esos fucking dedos amigos!!!!!!!!